El uso del incienso en el Budismo en las oraciones es para simbolizar una promesa a Buda de que no interrumpiremos nuestro camino hacia el desapego, la compasión y la iluminación, es una ofrenda para los maestros iluminados, el incienso también sirve como una herramienta para limpiar y purificar.
Así como el humo perfumado del incienso no se detiene y no deja de fluir, las prácticas búdicas no deberán ser interrumpidas. Por ese motivo, al realizar sus prácticas budistas, al encender un incienso, hágalo con el corazón, con verdad y comprometiéndose a no abandonar sus creencias, su práctica espiritual y el aprendizaje que ésta le proporcionó.
Filosofía de vida
9 de noviembre de 2012
Suscribirse a:
Entradas (Atom)