Filosofía de vida


13 de junio de 2007

Retiro Dzogchen

Cada año tenemos la suerte de contar con la visita del Maestro Namkhai Norbu Rinpoché, director de la Comunidad Dzogchen.
El Dozgchén, doctrina budista que significa "la gran perfección", es el llamado camino de la autoliberación. Fue introducida en el Tíbet por Padmasarbhava. Para aplicarlo, no hay nada a que el practicante deba renunciar, nada a purificar ni nada a transformar. La visión kármica que aparece, cualquiera que sea, es utilizada como camino. "Autoliberación", en sentido del Dzogchen, significa que todo lo que se manifiesta en el campo de la experiencia del practicante, es dejado libre de manifestarse tal cual es, sin ser juzgado bueno o malo, bonito o feo. Y, en este momento mismo, si no hay apego, sin esfuerzo y tambien sin voluntad, lo que se levanta, pensamiento o acontecimiento aparentemente exterior, se libera automáticamente de sí mismo.



Las enseñanzas Dzogchen, también conocidas como Atiyoga, o el Yoga Primordial, constituyen un sendero íntegro para la realización de la verdadera condición de cada individuo, y se caracterizan por su enfoque directo ya que, en su esencia, no dependen de formas externas ni rituales.
Chögyal Namkhai Norbu, nació en Dergué, en el Tíbet Oriental. Él fue reconocido a los tres años como el Tulku (*) de Adzam Drugpa, un importante maestro de Dzogchen. Después de completar sus estudios académicos, recibió enseñanzas de importantes maestros de Dzogchen y practicó con ellos. Cuando los eventos políticos hicieron que abandonase el Tíbet, se estableció en Sikkim. Luego trabajó como profesor en el Instituto para el Medio y el Extremo Oriente en Roma y, más adelante, en el Instituto Universitario Oriental en Nápoles. En la actualidad, el maestro viaja por todo el mundo para propagar las enseñanzas del Dzogchen por medio de retiros y seminarios.


Asistí a uno de dichos retiros que se realizó en Chosica. Fue gente de todo el mundo....australianos, vietnamitas, americanos, italianos, peruanos....unidos para aprender y practicar las enseñanzas de esta doctrina budista. El retiro se realizó en la Cantuta, con un clima maravilloso. Las enseñanzas empezaban muy temprano en la mañana, seguidas de una clase de yoga dirigida por un profesor italiano que acompañó al maestro en su gira por Latinoamérica. Fue una experiencia muy bonita que duró todo un fin de semana.

Cosas como estas unen a gentes tan distintas y a la vez tan parecidas....todos estabamos ahí para aprender a escuchar, aprender a compartir, aprender a convivir; para mí eso fue súper importante.
(*) reencarnación